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La región del Sahel, históricamente marcada por la influencia y dominación extranjera, está experimentando en los últimos años un verdadero cambio sin precedentes en su panorama político y social.

La reciente creación de la Confederación de Estados del Sahel (CES) por los líderes de Burkina Faso, Mali y Níger, el capitán Ibrahim Traoré, el coronel Assimi Goita y el general Abdourahamane Tchiani, respectivamente, marca el inicio de una nueva era en la lucha anticolonialista y la defensa de las soberanías nacionales en África.

La Fundación de la Confederación de Estados del Sahel

Durante la primera cumbre de la Alianza de los Estados del Sahel (AES), celebrada en Niamey, la capital de Níger, los líderes de los tres países firmaron un tratado histórico que formaliza la creación de la CES.

Este evento ha sido descrito por la AES en su como “un paso crucial” hacia la creación de una federación saheliana, un sueño largamente acariciado por los pueblos de la región. La CES no solo busca promover la cooperación y la integración en diversos ámbitos como la seguridad, el desarrollo económico-social y la cultura, sino también establecer una comunidad fuerte e independiente, alejada del dominio de potencias extranjeras.

Fortalecimiento de la Cooperación Económica y Financiera

Uno de los primeros grandes pasos de la CES ha sido el refuerzo de la cooperación económica y financiera entre los países miembros. Entre las medidas anunciadas se encuentran la creación de un banco de inversiones y un fondo de estabilización para el Sahel.

Estas iniciativas buscan fomentar el desarrollo económico de la región y proporcionar una mayor estabilidad financiera, reduciendo así la dependencia de ayudas externas y consolidando la autosuficiencia económica.

Liderazgo y Objetivos de la Alianza de Estados del Sahel

El coronel Assimi Goita ha sido nombrado presidente de la Alianza de Estados del Sahel por un mandato de un año. En su discurso de aceptación, Goita enfatizó que esta decisión marca un hito histórico para la alianza, cuyo objetivo principal es reforzar la cooperación entre los países miembros para promover la seguridad y el desarrollo en la región. Este enfoque se centra en abordar las amenazas internas, como el terrorismo, y construir una comunidad resiliente y próspera.

Un Frente Unido contra la Influencia Extranjera

El general Abdourahamane Tchiani, en sus declaraciones, subrayó que la AES es la única agrupación subregional eficaz en la lucha contra el terrorismo, criticando a la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) por su falta de implicación en esta lucha.

Tchiani abogó por una CES que se convierta en una “comunidad alejada del dominio de potencias extranjeras”, reflejando un fuerte sentimiento anticolonialista que resuena en la región. En enero, las autoridades de Níger, Mali y Burkina Faso anunciaron su retirada inmediata de la Cedeao, argumentando que esta organización se había convertido en “una amenaza” para sus Estados miembros.

Un Futuro de Autodeterminación y Resistencia

La formación de la Confederación de Estados del Sahel simboliza el renacimiento de los pueblos del Sahel, que se levantan contra los continuos abusos y la influencia de Occidente.

Este movimiento no solo representa una reivindicación de la soberanía nacional, sino también una nueva esperanza de cooperación y desarrollo regional autónomo. La CES, bajo el liderazgo de la AES, está encaminada a convertirse en un baluarte de resistencia y autodeterminación en África, inspirando a otras regiones del continente y del mundo a seguir su ejemplo.

En conclusión, la creación de la Confederación de Estados del Sahel es un testimonio del espíritu indomable de los pueblos del Sahel y su determinación de forjar un futuro libre de la opresión extranjera principalmente el colonialismo francés. Este nuevo capítulo en la historia de la región podría ser el comienzo de una era de prosperidad y autodeterminación para toda África.