Ironía Global: Risas y Criticas en la Escena Política Mundial.
El neoliberalismo, esa corriente económica que nos prometió el paraíso en la Tierra, nos ha traído tantos beneficios que es difícil enumerarlos todos. Pero voy a intentarlo.
En primer lugar, gracias al neoliberalismo, ahora podemos disfrutar de la maravilla del mercado libre, donde todos tienen las mismas oportunidades para triunfar y ser ricos. Por supuesto, eso significa que aquellos que no tienen éxito en la vida simplemente no trabajaron lo suficiente, y se merecen su pobreza.
Gracias al neoliberalismo, ahora tenemos una economía más eficiente, donde las empresas pueden recortar costos y maximizar sus ganancias sin preocuparse por las consecuencias para los trabajadores o el medio ambiente. Y si los trabajadores se quejan, simplemente pueden ser despedidos y reemplazados por otros que estén dispuestos a trabajar por menos.
Además, el neoliberalismo nos ha dado la oportunidad de privatizar todo, desde la educación y la salud hasta el agua y el aire que respiramos. ¿Quién necesita acceso universal a servicios básicos cuando puedes pagar por ellos?
Y no podemos olvidar los maravillosos logros del neoliberalismo en la política exterior. La promoción de la democracia y los derechos humanos en todo el mundo ha sido un gran éxito, como lo demuestran las guerras y las invasiones que hemos visto llevar a cabo en nombre de la libertad y la justicia.
En resumen, gracias al neoliberalismo, ahora vivimos en un mundo donde el dinero es lo único que importa, y donde la desigualdad y la injusticia son el precio que debemos pagar por la libertad y el progreso. ¿Quién podría pedir más que eso?