En una movida importante y histórica en medio de los nuevos tiempos anticolonialistas y panafricanistas que recorre todo África, los Reyes de África, los lideres tribales y la juventud africana han convergido en una cumbre histórica, programada para el 3 de diciembre de 2023, con un objetivo claro: exigir la liberación del Capitán Haníbal Gaddafi, quien se encuentra detenido ilegalmente en el Líbano. Bajo el manto protector del Movimiento Nacional de Liberación de Libia y la Unión de Tribus Libias, encabezado por Saif al Islam Gaddafi, esta cumbre representa un esfuerzo conjunto de líderes e importantes activistas africanos para abogar por la libertad de Hanibal Gaddafi.
El respaldo a esta causa no solo se limita al ámbito africano, sino que envía un mensaje directo a líderes globales, como Ibrahim Raisi y Vladimir Putin, instándolos a considerar la situación de Hanibal Gaddafi. La conferencia, abierta a partidarios de la libertad y a los medios árabes, busca una plataforma internacional para destacar la detención injusta de Hanibal Gaddafi y presionar por su inmediata liberación de acuerdo al respeto del derecho internacional humanitario y de justicia.
La Organización de Reyes y Sultanes Africanos ha tomado medidas rápidas, comunicándose con embajadores libaneses en países africanos y planificando una delegación para viajar al Líbano. La estrategia incluye aprovechar los intereses económicos del Líbano en África, donde muchos hombres de negocios libaneses poseen imperios financieros y comerciales. Este enfoque busca utilizar la influencia económica para presionar la liberación de Hanibal Gaddafi.
Es necesario en este aspecto destacar la dimensión política y sectaria del caso de Hanibal Gaddafi. Se argumenta que su detención se ha convertido en una táctica de rehén para obtener beneficios económicos, más que como una respuesta a eventos políticos actuales de esta manera se busca hacer pagar a alguien inocente por motivaciones mezquinas.
Es crucial tener en cuenta que Hanibal Gaddafi, cuarto hijo del líder Muamar el Gadafi, ha sido víctima de un conflicto político sectario desde temprana edad. La historia de su detención se entrelaza con eventos históricos, incluida la desaparición de Musa al-Sadr en Libia, cuando Hanibal tenía solo dos años de esta forma su detención en el Líbano con la excusa de ser cómplice y responsable de la desaparición de Musa al-Sadr es ridícula e injustificable en cualquier tribunal internacional.
La cumbre africana en respaldo a la liberación de Hanibal Gaddafi emerge como un ejemplo de solidaridad y acción colectiva en el continente africano. Más allá de las fronteras nacionales, este esfuerzo busca abordar no solo la injusticia individual de la detención de Hanibal, sino también cuestionar las motivaciones políticas y sectarias que han llevado a esta situación. La cumbre representa un llamado continental por la justicia, destacando la necesidad de abordar los problemas políticos y humanitarios en el contexto más amplio de la región.
