Agradezco en gran manera a nuestro colega Andrew Korybko quien desde Rusia se ha tomado el tiempo para participar de esta entrevista para aclarar algunos puntos interesantes sobre la actual confrontación entre la OTAN y Rusia.
- ¿Cuál es su opinión general sobre el conflicto entre Rusia y la OTAN? ¿Cómo describiría la situación actual?
La última fase del conflicto ucraniano es una guerra por poderes entre la OTAN y Rusia. La primera quiere utilizar los recursos humanos, la guerra de la información y el territorio ucranianos para erosionar la seguridad nacional de la segunda, que obviamente intenta defender mediante su operación especial.
La OTAN quiere, en última instancia, coaccionar a Rusia para que haga una serie interminable de concesiones unilaterales con el fin de restaurar la unipolaridad, mientras que Rusia quiere acelerar la transición sistémica global hacia la multipolaridad.
- ¿Cuáles son los intereses de la OTAN en sus continuas disputas y provocaciones contra Rusia?
La OTAN quiere desplegar una combinación de sistemas defensivos y ofensivos en Ucrania que luego podrían aprovecharse para coaccionar a Rusia para que cambie sus políticas bajo la amenaza de una invasión ucraniana respaldada por la OTAN de su territorio universalmente reconocido antes de 2014.
El componente de guerra de la información de esta campaña busca promover simultáneamente la “balcanización” de ese estado objetivo, que es poco realista de lograr pero que, sin embargo, se está persiguiendo como parte de los esfuerzos de Occidente para restaurar la unipolaridad.
- ¿Podemos decir que la OTAN sostiene y alimenta el conflicto en Ucrania? ¿Cómo ha respondido Rusia a las constantes amenazas y provocaciones de Occidente?
La OTAN respalda plenamente a Ucrania en esta guerra por poderes mediante armas, fondos, apoyo a la guerra de la información, asistencia logística y el señalamiento de fuerzas rusas. Hasta ahora todo esto ha animado a Kiev a cruzar todas y cada una de las líneas rojas del Kremlin, a las que Moscú se ha abstenido de responder de forma abrumadora, principalmente por razones políticas y por temor a que esta guerra por poderes se convierta en una guerra convencional directa con la OTAN. Por muy bienintencionados que sean estos cálculos, han envalentonado inadvertidamente a Kiev.
- 4) ¿Cómo ha visto la percepción y la respuesta de los vecinos de Rusia a las constantes presiones e injerencias de Occidente para la aplicación de sanciones?
El viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Mijaíl Galuzin, declaró el martes que algunas repúblicas centroasiáticas están considerando la posibilidad de cumplir el régimen de sanciones de Occidente, aunque todavía no han dado ese paso.
Al parecer, China también ha cumplido algunas de ellas, aunque los informes también indican que está incumpliendo otras. El reto para estos países es que sus lazos comerciales, de inversión y tecnológicos con Occidente les hacen susceptibles de las llamadas “sanciones secundarias”, lo que limita en cierta medida su libertad de acción.
- Hemos visto cómo en los últimos meses tanto Estados Unidos como Gran Bretaña han procedido a enviar armamento cada vez más sofisticado al régimen ucraniano. ¿Cree que existe la posibilidad de una escalada militar en el conflicto entre Rusia y la OTAN? ¿Cuáles son los riesgos y las implicaciones de dicha escalada?
El escenario de un enfrentamiento entre la OTAN y Rusia está siempre presente, aunque cada una de las partes parece tener cuidado de que eso no ocurra porque podría llevar rápidamente a una escalada nuclear y a escenarios apocalípticos.
No obstante, podría decirse que la OTAN está animando a Kiev a atacar el territorio ruso reconocido universalmente antes de 2014 y posiblemente incluso a ocupar partes del mismo como “palanca”. Si se intenta esto último, entonces Rusia podría reaccionar de forma abrumadora, aunque probablemente manteniendo su respuesta contenida a Ucrania.
- A lo largo del conflicto, los medios de comunicación occidentales se han centrado en la continua manipulación de los hechos reales. ¿Cuál ha sido el papel de los medios de comunicación occidentales en la cobertura de este conflicto?
Los medios de comunicación occidentales no lograron convencer al Sur Global para que se pusiera de su lado contra Rusia mediante la imposición de sanciones. Su propósito en la actualidad es, por tanto, mantener el apoyo interno a esta guerra por delegación, aunque está luchando por conseguirlo en medio de informes que indican que un número creciente de personas se muestran escépticas ante la narrativa oficial e incluso, en algunos casos, se oponen rotundamente a ella. Si una masa crítica se vuelve contra esta política, podría presionar a algunos Estados de la UE para que reduzcan su implicación en este conflicto e impulsen la paz en su lugar.
1 Pingback