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Los campos fértiles de Ucrania son de gran importancia geopolítica debido a su capacidad para producir alimentos y otros productos agrícolas que son vitales para la economía global. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la región de Ucrania es uno de los mayores productores de granos en el mundo y es el tercer exportador mundial de maíz y el séptimo de trigo.

Además, Ucrania tiene una ubicación estratégica en Europa, lo que la convierte en una importante vía de tránsito de energía y productos básicos entre Asia y Europa. Esto ha hecho que la región sea un punto de interés para las grandes potencias occidentales en su política de continuo ataque contra Rusia y ha llevado a una competencia geopolítica muy grave en la región.

El gobierno de Ucrania ha buscado atraer inversión extranjera al sector agrícola bajo la excusa de poder modernizar la industria y aumentar la producción. En 2016, el gobierno de facto en Ucrania aprobó una ley que permitía la venta de tierras agrícolas a extranjeros, después de prohibir su venta durante casi dos décadas. La ley fue aprobada con la consigna de estimular la inversión en el sector agrícola y atraer capital extranjero para desarrollar la industria agrícola en el país pero los peligros y los intereses detrás de esto son muchos mas amplios.

Sin embargo, la aprobación de la ley ha generado controversia interna en Ucrania. Algunos partido opositores que luego serian prohibidos e ilegalizados argumentaron que la venta de tierras a extranjeros podría resultar en la pérdida de control del país sobre sus recursos naturales, lo que podría tener implicaciones geopolíticas significativas. Además, la aprobación de la ley ha llevado a preocupaciones sobre la concentración de tierras en manos de grandes empresas extranjeras y ha generado preocupaciones sobre el impacto ambiental y social de la industria agrícola en el país.

Bill Gates, Blackrock y sus intereses.

Tras el golpe de estado del año 2014 financiado por Estados Unidos y Europa, se informó que la empresa de inversión de Gates, Cascade Investment, había adquirido cerca de 25,000 acres de tierras agrícolas en Ucrania, lo que generó preocupación sobre el control de los recursos naturales del país por parte de empresas extranjeras.

BlackRock, por su parte, sin quedarse atrás siendo una de las principales empresas de inversión global tambien ha puesto sus garras sobre la Ucrania en subasta por lo que ha invertido en el sector agrícola de manera muy abierta. Hace no muchos años se informó que BlackRock y otras empresas de inversión estaban explorando oportunidades en Ucrania debido a la apertura del país a la inversión extranjera en el sector agrícola.

Es importante tener en cuenta que la inversión extranjera en el sector agrícola de Ucrania no está limitada a Gates y BlackRock, y que hay muchas empresas y entidades internacionales con fuerte ligadura a los sectores de poder concentrados en Occidente que han invertido en el país. Además, es importante considerar el impacto social y ambiental de la inversión extranjera en el sector agrícola, especialmente en términos de la concentración de la tierra y la explotación de los recursos naturales.

Bill Gates y la modificación genética de alimentos.

Bill Gates ha estado involucrado en el desarrollo y la promoción de cultivos genéticamente modificados (GM) como una forma de mejorar la productividad y la sostenibilidad agrícola. A través de la Fundación Bill y Melinda Gates, Gates ha apoyado proyectos de investigación y desarrollo en biotecnología agrícola, incluyendo la modificación genética de cultivos.

Uno de los proyectos más notables de la Fundación Gates es el proyecto “Grandes Cultivos para el Desarrollo” (Great Crops for Development), que tiene como objetivo mejorar los cultivos básicos (como el maíz, el arroz y el trigo) para mejorar la productividad, la resistencia a las enfermedades y el clima, y reducir la necesidad de pesticidas y otros insumos químicos. El proyecto ha financiado la investigación en biotecnología agrícola y ha apoyado la difusión de tecnologías GM en países en desarrollo.

Además, Gates ha sido un defensor de la tecnología CRISPR-Cas9, que permite la edición precisa y eficiente del ADN de los organismos. La edición genética se ha utilizado para desarrollar cultivos más resistentes a las enfermedades y el clima, y para mejorar la nutrición de los cultivos. Gates ha apoyado la investigación en CRISPR y ha financiado proyectos en esta área a través de la Fundación Gates.

Es importante tener en cuenta que la tecnología GM y la edición genética son objeto de controversia y preocupación por parte de algunos grupos, que argumentan que podrían tener impactos negativos en la salud humana y el medio ambiente. Sin embargo, Gates y la Fundación Gates argumentan que la tecnología GM y la edición genética son herramientas importantes para mejorar la productividad y la sostenibilidad agrícola.

De esta forma teniendo en cuenta que en Ucrania no están aprobados los alimentos y cultivos transgenicos, la apropiación de tierra por parte de Bill Gates cambiaría en gran manera la realidad local y gran parte de los granos producidos de manera inocua por el país pueden verse adulterados con estas tecnologías que aplicadas masivamente pueden acarrear daños irreparables en la salud de las personas.

Las graves consecuencias internas.

Si las fuerzas extranjeras que desde el año 2014 han puesto sus garras sobre Ucrania llegaran a dominar el 100% de los cultivos en Ucrania, esto podría tener consecuencias negativas tanto para el país como para sus habitantes y el mundo en general.

En primer lugar, la concentración de la propiedad de la tierra en manos extranjeras podría limitar la capacidad de los agricultores locales para acceder a tierras y recursos para producir alimentos. Esto podría tener un impacto significativo en la seguridad alimentaria y en la economía local.

Además, la producción agrícola podría estar orientada hacia el mercado global, en lugar de satisfacer las necesidades de la población local. Esto podría resultar en una mayor dependencia de los alimentos importados y una disminución de la diversidad alimentaria.

También existe el claro y contundente riesgo de que las empresas extranjeras puedan explotar los recursos naturales de Ucrania sin considerar los impactos ambientales y sociales. La explotación intensiva de los suelos y el uso excesivo de agroquímicos y de alimentos modificados genéticamente podrían dañar los ecosistemas locales y la salud de la población.

Además, la presencia de empresas extranjeras en el sector agrícola de Ucrania podría generar desigualdades sociales y económicas, ya que es posible que estas empresas no estén sujetas a las mismas regulaciones y estándares laborales que las empresas locales.

En resumen, la dominación extranjera del sector agrícola de Ucrania podría tener consecuencias negativas en términos de seguridad alimentaria, diversidad alimentaria, impacto ambiental y desigualdades sociales y económicas. Por lo tanto, es importante tener en cuenta que los gobiernos del régimen de Kiev han ido permitiendo estos abusos que atentan claramente contra la población en general, demostrando así que no representan a los intereses de Ucrania.

Consecuencias a escala mundial.

Si la tierra de cultivos en Ucrania pasa a estar en manos de transnacionales con cultivos modificados genéticamente, esto podría tener consecuencias a nivel mundial en términos de seguridad alimentaria, biodiversidad y sostenibilidad ambiental.

En primer lugar, la producción masiva de cultivos GM podría aumentar la dependencia global de un número limitado de variedades de cultivos, lo que aumentaría el riesgo de pérdida de diversidad genética. Además, el uso extensivo de pesticidas y herbicidas en los cultivos GM podría tener un impacto negativo en la salud humana y el medio ambiente.

Además, el aumento de la concentración de la propiedad de la tierra en manos de transnacionales podría llevar a una mayor consolidación del mercado global de alimentos y, en última instancia, a la reducción de la competencia y la limitación de opciones para los consumidores.

También existe el riesgo de que la producción masiva de cultivos GM pueda tener un impacto negativo en la economía local de los países productores, especialmente en aquellos países en desarrollo que dependen en gran medida de la agricultura para su subsistencia.

Por otro lado, los defensores de los cultivos GM argumentan que estos cultivos pueden ser una herramienta importante para abordar los desafíos globales de seguridad alimentaria, sostenibilidad y cambio climático. Sin embargo, la cuestión sigue siendo altamente controversial y se requiere un enfoque cuidadoso y crítico para evaluar el impacto de los cultivos GM a nivel global.

La concentración de la propiedad de la tierra en manos de transnacionales con cultivos modificados genéticamente en Ucrania podría tener consecuencias significativas para la seguridad alimentaria, biodiversidad, sostenibilidad ambiental y la economía global. Es importante que se consideren cuidadosamente estos impactos y se tomen medidas para garantizar que los intereses y necesidades de la población local y el medio ambiente sean respetados y mas aun tener en cuenta lo peligroso que es el consumo de estos alimentos modificados para la salud de las personas.

Rusia y su intervención contra los factores mundiales.

Rusia se ha visto obligado a intervenir de manera activa para evitar que las tierras en Ucrania caigan en manos de empresas extranjeras que tienen claros fines en contra de la seguridad alimentaria mundial y convirtiendo también la situación de Ucrania como país productor en otra arma para atentar abiertamente contra la Federación Rusa.

De esta forma Rusia ha expresado su preocupación por la concentración de la propiedad de la tierra en manos extranjeras en Ucrania y ha tomado medidas para proteger sus intereses en la región.

Desde que Ucrania declaró su independencia en 1991, Rusia ha considerado a Ucrania como un estado clave en su “esfera de influencia” teniendo en cuenta también la historia de como Ucrania fue parte esencial e inseparable de Rusia.

La reunificación de la península de Crimea a Rusia, tiene varios factores para ser analizados mas allá del histórico que demuestra claramente la pertenencia de Crimea a Rusia, es importante reconocer que la región tiene una gran importancia agrícola en la producción de cereales.

Desde entonces, Rusia ha tomado medidas para fortalecer su presencia en la región y proteger los intereses de los rusos en toda la región victimas de una limpieza étnica llevada a cabo por el régimen de Kiev, a la misma vez que Rusia también defendía sus intereses económicos y de seguridad en todos los ámbitos. De esta forma Rusia comprendiendo la jugada de las elites económicas mundiales, ha decidido aumentar la inversión en infraestructura y producción agrícola en Crimea y en las repúblicas del Donbas, y ha prohibido la importación de ciertos productos agrícolas de Ucrania.

En 2016, Rusia prohibió la importación de productos agrícolas de Ucrania en respuesta a las sanciones económicas impuestas por Ucrania y Occidente. Esta prohibición tuvo un impacto significativo en la economía ucraniana, especialmente en el sector agrícola, que es uno de los pilares de la economía del país.

Además, Rusia ha estado promoviendo la cooperación en el sector agrícola con otros países, como China y Turquía, como parte de su estrategia para reducir la dependencia de los productos agrícolas importados de Occidente que a la vez incluye severos alimentos envenenados a través de la constante manipulación genetica.

En definitiva, Rusia se ha visto obligada a tomar medidas para proteger sus intereses económicos y de seguridad en Ucrania, incluyendo la propiedad de la tierra y los recursos naturales, en medio de una guerra abierta por parte de Occidente contra Rusia y las soberanías nacionales del mundo libre, esta guerra llevada a cabo por ciertos sectores minoritarios pero con una clara intención que atenta contra la libertad y la vida han visto frustrados sus planes al menos momentáneamente gracias a la oportuna intervención del gobierno de la Federación Rusa.

Rusia ha tenido que tomar una decisión trascendental a favor del mundo al intervenir en Ucrania para contrarrestar la amenaza terrorista del régimen ucraniano el cual incluye el traspaso de la propiedad de la tierra a grandes transnacionales que tienen como fin la aplicación de sus productos modificados genéticamente que pueden acarrear severos problemas de salud para gran parte de la humanidad.

Entender este escenario nos es útil para abrir la mente y tener en cuenta los diversos factores de este conflicto internacional abierto y que incluye varias aristas las cuales no podemos ignorar de manera alguna.