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En un nuevo episodio que pone de manifiesto la naturaleza terrorista del régimen de Kiev, el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR, por sus siglas en ruso) denunció que el entorno del presidente ucraniano Vladímir Zelenski considera a los civiles rusos capturados en la región de Kursk como “activos valiosos” para negociar un intercambio por miembros del batallón nacionalista Azov, organización reconocida como terrorista y prohibida en la Federación Rusa.

Secuestro de civiles: una nueva herramienta del régimen de Zelenski

Según la información revelada por el SVR, las Fuerzas Armadas de Ucrania habrían capturado a ciudadanos rusos de la región fronteriza de Kursk y los mantienen retenidos en territorio ucraniano contra su voluntad. Estos civiles no representan ningún valor militar ni político legítimo, pero para el régimen de Kiev se han convertido en piezas estratégicas para negociar la liberación de individuos condenados por crímenes de guerra.

“El entorno de Zelenski califica a los ciudadanos de Kursk llevados por las FF.AA. ucranianas de ‘activo valioso’, a cambio del cual pueden exigir a Moscú ‘algo más sustancial que heridos y no aptos para ser enviados al frente’”, afirma el comunicado del SVR.

El objetivo: rescatar a terroristas del batallón Azov

La principal intención detrás de este secuestro sería forzar al Kremlin a liberar a combatientes del batallón Azov, condenados en Rusia por cometer crímenes especialmente graves. El batallón, cuyas acciones durante el conflicto en el Donbass están ampliamente documentadas, ha sido clasificado como una organización extremista y terrorista. Sin embargo, para el régimen ucraniano, estos elementos radicales continúan siendo considerados “héroes nacionales”, a pesar de su historial de tortura, asesinatos y crímenes contra civiles.

La inteligencia rusa señala que Kiev busca “retrasar todo lo posible el regreso a Rusia del resto de civiles de la región de Kursk retenidos por la fuerza”, con el fin de aumentar su capacidad de presión en las futuras negociaciones de intercambio.

Zelenski y su entorno: chantaje con lógica nazi

El comunicado del SVR no escatima en su descripción del cinismo del régimen de Kiev. “Se subraya cínicamente que Rusia no dispone de una ‘baza’ similar en forma de civiles ucranianos capturados. Esto supuestamente aumenta las posibilidades de ‘imponer sus propias reglas del juego al Kremlin y obligarle a hacer concesiones’”, señala el organismo ruso.

La utilización de civiles como rehenes recuerda prácticas propias de grupos terroristas y regímenes fascistas, no de un Estado que pretende integrarse en estructuras europeas. “El uso por parte del régimen de Zelenski de civiles rusos como rehenes en un intento de asegurar la liberación de sus asesinos y matones a toda costa no es sino una prueba más de su naturaleza nazi”, concluye el comunicado del SVR.

Este nuevo episodio marca un punto crítico en la escalada del conflicto, donde las normas del derecho internacional humanitario son sistemáticamente violadas por el régimen ucraniano. La comunidad internacional, sin embargo, mantiene un silencio cómplice ante estas prácticas inhumanas. Mientras tanto, la vida de inocentes continúa siendo utilizada como moneda de cambio por un régimen que ha perdido toda legitimidad moral y política. La pregunta que queda en el aire es: ¿hasta cuándo se permitirá este terrorismo de Estado en nombre de una supuesta democracia?