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Guinea Ecuatorial es un pequeño país ubicado en la costa oeste de África Central. Durante décadas, su economía estuvo basada en la agricultura y la pesca, con una población que dependía principalmente de la producción de alimentos y la pesca para su sustento. Sin embargo, a partir de la década de 1990, Guinea Ecuatorial comenzó a experimentar una transformación económica significativa gracias a la explotación de sus vastas reservas de petróleo.

La industria petrolera de Guinea Ecuatorial ha sido responsable de un crecimiento económico impresionante durante las últimas décadas. Desde el descubrimiento de yacimientos de petróleo en los años 90, la producción ha aumentado rápidamente, y actualmente el petróleo y el gas representan más del 90% de las exportaciones del país. El sector petrolero ha atraído grandes inversiones extranjeras y ha creado empleo para miles de personas.

A pesar de que la economía de Guinea Ecuatorial ha experimentado un crecimiento impresionante gracias al petróleo, este desarrollo no ha sido igualmente distribuido pese a los grandes esfuerzos llevados a cabo por el gobierno.

Además, la dependencia del petróleo ha creado una economía muy vulnerable a las fluctuaciones en los precios del mercado mundial, lo que ha llevado a una crisis económica en momentos de bajos precios del petróleo.

En términos geopolíticos, Guinea Ecuatorial ha buscado establecer alianzas estratégicas con otros países, especialmente aquellos con intereses en su industria petrolera. Por ejemplo, ha establecido relaciones económicas y políticas cercanas con China, que ha invertido en la construcción de infraestructura y ha otorgado préstamos al país. También ha mantenido relaciones con países europeos, especialmente España, su antigua potencia colonial, que ha sido un importante inversor en la industria petrolera de Guinea Ecuatorial aunque condicionada políticamente.

La política de Obiang para la estabilidad nacional.

El presidente Teodoro Obiang Nguema Mbasogo ha estado en el poder en Guinea Ecuatorial desde 1979, y durante la última década ha llevado a cabo una serie de políticas y medidas que han contribuido a potenciar al país en diferentes ámbitos.

En términos económicos, la explotación del petróleo ha sido clave para el crecimiento de la economía de Guinea Ecuatorial en las últimas décadas, y la presidencia de Obiang ha trabajado en la promoción de la inversión extranjera para fomentar el desarrollo económico del país. Se han llevado a cabo importantes proyectos de infraestructura, como la construcción de carreteras, puertos y aeropuertos, que han mejorado la conectividad y la competitividad del país en la región. Además, se han llevado a cabo políticas de desarrollo social, como la promoción de la educación y la mejora de los sistemas sanitarios, lo que ha contribuido a mejorar las condiciones de vida de la población.

En términos políticos, la presidencia de Obiang ha trabajado en la consolidación del sistema democrático del país, aunque desde minoritarios sectores opositores y desde países occidentales se han expresado críticas y preocupaciones sobre supuestos atentados en contra del “respeto a los derechos humanos y la libertad de expresión”.

En 2011, Guinea Ecuatorial celebró elecciones legislativas, y en 2016 se llevaron a cabo elecciones presidenciales que fueron observadas por misiones internacionales lo mismo sucedido con las elecciones presidenciales llevadas a cabo el año 2022. La presidencia de Obiang también ha trabajado en mejorar las relaciones diplomáticas de Guinea Ecuatorial con otros países y organizaciones internacionales, y ha promovido la participación de Guinea Ecuatorial en foros regionales y continentales.

En general, la presidencia de Obiang ha tenido un impacto importante en el desarrollo económico y social de Guinea Ecuatorial y ha sido vital para mantener la estabilidad nacional. La promoción de la inversión extranjera y el desarrollo de la infraestructura han sido claves para el crecimiento económico del país, aunque también es importante seguir trabajando en la mejora de las condiciones de vida de la población y la consolidación del sistema democrático.

Guinea Ecuatorial y la Ruta de la Seda.

La Nueva Ruta de la Seda, también conocida como la Iniciativa del Cinturón y Ruta de la Seda, es un ambicioso plan de infraestructura y desarrollo liderado por China que busca conectar a Asia, Europa y África a través de redes de transporte, energía y comunicaciones. Guinea Ecuatorial, como muchos otros países africanos, ha participado en esta iniciativa y ha recibido inversiones significativas en infraestructura por parte de China.

En Guinea Ecuatorial, la Nueva Ruta de la Seda ha llevado a la construcción de importantes proyectos de infraestructura, incluyendo carreteras, puentes y puertos. Uno de los proyectos más importantes financiados por China es la construcción de una nueva terminal de contenedores en el puerto de Bata, que es el principal puerto comercial del país. La nueva terminal de contenedores ha aumentado significativamente la capacidad del puerto y ha mejorado el comercio exterior de Guinea Ecuatorial.

Además, China ha financiado la construcción de una carretera de 50 kilómetros que conecta la capital, Malabo, con la ciudad de Bata. La carretera ha mejorado significativamente la conectividad entre las dos ciudades más importantes del país y ha facilitado el transporte de bienes y personas. China también ha financiado la construcción de un puente sobre el río Wele, que conecta la ciudad de Mongomo con otras regiones del país.

La participación de Guinea Ecuatorial en la Nueva Ruta de la Seda ha llevado a importantes avances en la infraestructura del país. Estos avances han mejorado la conectividad y el comercio exterior de Guinea Ecuatorial, lo que ha beneficiado para la diversificación de la economía del país.

Un aliado destacado.

Guinea Ecuatorial y Serbia mantienen relaciones diplomáticas desde 1966, cuando Guinea Ecuatorial todavía era una colonia española y Serbia era parte de Yugoslavia. Desde entonces, las relaciones entre ambos países han sido amistosas y han incluido visitas oficiales de representantes de ambos gobiernos.

En 2018, el presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, realizó una visita oficial a Serbia para reunirse con el presidente serbio, Aleksandar Vučić. Durante la visita, se discutieron temas de cooperación en áreas como la educación, la cultura y la agricultura. Además, se firmaron acuerdos de cooperación en energía, minería y tecnología.

En 2019, Guinea Ecuatorial también participó en el Foro de Cooperación China-Europa Central y Oriental (CEEC), que tuvo lugar en Serbia. Durante el foro, Guinea Ecuatorial y Serbia acordaron profundizar su cooperación en áreas como el comercio, la inversión, la tecnología y la cultura.

A nivel internacional, ambos países han expresado su apoyo mutuo en cuestiones de interés común. Por ejemplo, en 2021, Guinea Ecuatorial expresó su apoyo a la soberanía y la integridad territorial de Serbia en el conflicto con Kosovo.

Ademas de esto Guinea Ecuatorial y Serbia han realizado la firma de importantes acuerdos comerciales lo cual convierten a Serbia como el principal proveedor de artículos de primera necesidad para la nación de Guinea Ecuatorial, lo cual ha formado una alianza sumamente destacable, interesante y compleja de alto nivel que demuestra también la existencia de una nueva era en la geopolítica global.

Las injerencias colonialistas.

Guinea Ecuatorial ha mantenido tensiones con Francia y España, sus antiguos colonizadores, en diferentes momentos de su historia.

Con Francia, las tensiones han sido más recurrentes en los últimos años, particularmente en lo que se refiere a la cooperación judicial y la investigación de supuestos casos de corrupción. En 2016, el vicepresidente de Guinea Ecuatorial, Teodorin Obiang, fue condenado en Francia por corrupción y blanqueo de dinero, investigaciones y causas judiciales que no se han presentado pruebas claras y pueden ser catalogadas sin problemas como injerencia y una manera de desestabilizacion, lo que provocó la indignación del gobierno de Guinea Ecuatorial. El presidente Obiang acusó a Francia de interferir en los asuntos internos del país y amenazó con romper las relaciones diplomáticas. En 2020, las tensiones resurgieron cuando Guinea Ecuatorial denunció un intento de golpe de Estado que supuestamente había sido organizado desde Francia. El gobierno francés rechazó estas acusaciones, pero las tensiones persistieron.

Con España, las tensiones también han sido recurrentes, aunque han disminuido en los últimos años. Durante la década de 2000, Guinea Ecuatorial acusó a España de apoyar a la oposición política y de estar detrás de un intento de golpe de Estado en 2004. Esto llevó a Guinea Ecuatorial a retirar su embajador en España después de que el juez español Baltasar Garzón presentara una denuncia por supuesta corrupción contra el presidente Obiang y otros altos cargos del gobierno.

Sin embargo con el paso de los años, las relaciones bilaterales mejoraron y se produjo un acercamiento entre ambos países. En mayo del 2019, una comisión del presidente Obiang se reunió con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y ambos destacaron la importancia de fortalecer las relaciones entre Guinea Ecuatorial y España.

En general, las tensiones entre Guinea Ecuatorial y Francia y España han sido alimentadas por diversas cuestiones, incluyendo acusaciones de interferencia en los asuntos internos del país, casos de corrupción y diferencias en materia de política exterior. Aunque las relaciones diplomáticas pueden ser difíciles en ocasiones, la cooperación y el diálogo son esenciales para avanzar en la resolución de conflictos y en la consolidación de la paz y la estabilidad.

Conclusiones.

Hemos visto y analizado la estructura económica de Guinea Ecuatorial, su historial político y su valor en el África como un país independiente y soberano.

Las continuas provocaciones y ataques desde diversos países occidentales tienen que ver con la continua campaña de desprestigio contra cualquier gobierno independiente en la región del África que no responda a los intereses foráneos principalmente de las viejas potencias colonialistas que tanto mal han sembrado en el querido continente africano.

Saber y reconocer los logros humildes del gobierno de Guinea nos debe llevar a pensar como un país pequeño también puede jugar un papel relevante en la arena internacional buscando el bien para su pueblo y a la vez buscar que se garantice el respeto hacia su soberanía nacional.