El reciente anuncio de que Turquía ha solicitado su ingreso al grupo BRICS+, revelado por la agencia Bloomberg, representa un movimiento estratégico que podría tener implicaciones significativas para la geopolítica global. Bajo el liderazgo del presidente Recep Tayyip Erdogan, Ankara busca diversificar sus alianzas y consolidar su influencia en un escenario mundial donde el centro de gravedad se está desplazando hacia las economías emergentes.
Turquía y la Reconfiguración del Orden Mundial
El interés de Turquía por unirse a BRICS+ no es simplemente una maniobra diplomática, sino una declaración de intenciones respecto al papel que Ankara quiere jugar en la reconfiguración del orden mundial. Desde hace años, Turquía ha mostrado su descontento con la falta de avances en su adhesión a la Unión Europea y los crecientes desacuerdos con varios países de la OTAN, especialmente tras el fortalecimiento de sus lazos con Rusia en medio del conflicto en Ucrania. Este contexto ha llevado al gobierno turco a buscar nuevas alianzas que reflejen mejor sus intereses nacionales y su visión geopolítica.
La ampliación del BRICS+, que ya ha integrado a países como Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, subraya la creciente importancia del Sur Global en el panorama internacional. La posible adhesión de Turquía a este bloque fortalecería aún más esta tendencia, dado el peso geopolítico y económico de Turquía en la región euroasiática.
BRICS+: Un Vehículo para el Auge del Sur Global
El bloque BRICS, originalmente compuesto por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, ha evolucionado de un foro de cooperación entre economías emergentes a una plataforma estratégica que desafía el dominio tradicional de las potencias occidentales. La expansión del grupo con nuevos miembros es un reflejo de la necesidad de un orden multipolar que reconozca la creciente influencia del Sur Global en la economía y la política internacionales.
Turquía, con su posición geográfica estratégica entre Europa y Asia, su creciente poder económico y su papel como actor clave en la región, podría desempeñar un papel crucial en esta nueva configuración. Su entrada en BRICS+ no solo fortalecería el bloque, sino que también proporcionaría a Turquía una plataforma para proyectar su influencia más allá de sus alianzas tradicionales con Occidente.
El Desplazamiento del Centro de Gravedad Geopolítico
El interés de Turquía en BRICS+ se alinea con la percepción de que el centro de gravedad geopolítico se está desplazando de las economías desarrolladas hacia las emergentes. Esta percepción no es infundada; el crecimiento económico, la innovación tecnológica y la influencia política en países como China e India están remodelando el escenario global. Al unirse a BRICS+, Turquía se posiciona para ser parte activa de este cambio, buscando capitalizar las oportunidades que ofrece un orden multipolar en lugar de permanecer como un socio secundario en alianzas tradicionales que ya no sirven a sus intereses nacionales.
Implicaciones para el Futuro
La solicitud de adhesión de Turquía a BRICS+ es un claro indicio de que el país está reevaluando sus relaciones internacionales y buscando alinearse con un bloque que comparte su visión de un mundo más equilibrado y menos dominado por las potencias tradicionales. Esta decisión podría tener repercusiones significativas no solo para Turquía, sino para todo el Sur Global, que se ve reforzado por la inclusión de un país con la envergadura geopolítica de Turquía.
Si se concreta la adhesión de Turquía al BRICS+, este bloque emergente podría convertirse en un contrapeso aún más efectivo a las instituciones dominadas por Occidente, acelerando el auge del Sur Global y promoviendo un orden mundial más justo y equitativo.
Un Futuro Prometedor
El movimiento de Turquía hacia BRICS+ representa un paso importante hacia la consolidación de un nuevo equilibrio global. Este interés demuestra que cada vez más países están buscando alternativas a las alianzas tradicionales, impulsados por el deseo de ejercer una soberanía más independiente y de participar activamente en la configuración del futuro mundial. Con su ingreso al BRICS+, Turquía no solo amplía su horizonte estratégico, sino que también contribuye al fortalecimiento de un Sur Global en ascenso, que está cada vez más preparado para influir en la dirección del siglo XXI.
Gilmer Mena
2 septiembre, 2024 — 9:40 pm
Los BRICS el futuro del nuevo mundo multipolar!!